Qué entendemos por "experiencia mistica" o experiencia espiritual?

....Seguramente casi todos los presentes entienden la mística como dentro de las religiones o como parte de las religiones. Es una forma de entenderlo en cierto modo cristiana-occidental. Pero me parece que esto no es así Más aún, podemos afirmar aunque suene un poco fuerte que la mística es independiente de la religión. No solo eso, sino que es previa y posterior a las religiones. Ustedes saben que el budismo no es una religión ya que no tiene dioses, no tiene templos, no tiene ritos o ceremoniales (exceptuando algunas ramas) y no tiene una jerarquía sacerdotal. Así es realmente el budismo en su origen y su capacidad de producir experiencias trascendentes no tiene nada que envidiar a otras formas de otras culturas. Este es un ejemplo. Otro muy importante es el chamanismo que ahora reverdece en todo el planeta. También tienen sus procedimientos y sus experiencias con lo sagrado.
Desde luego lo místico ha estado bajo el paraguas de las grandes religiones, pero también ha estado fuera de ellas. Lo espiritual o lo místico está en la esencia del ser humano y cuando volvemos sobre nosotros mismos, cuando conectamos con nuestra profundidad estamos abriendo la puerta a las grandes inspiraciones de la vida, a las grandes experiencias, a las verdades que reconocemos nos hacen libres y felices. 
Entonces ¿que es la mística? ¿De qué estamos hablando? Para empezar a perfilar el tema vamos a leer como lo define Miguel de Molinos, uno de los grandes místicos aunque maltratado por la historia. Así empieza su libro Guía Espiritual:
La ciencia mística no es de ingenio, sino de experiencia; no es inventada, sino probada; no leída, sino recibida, y así es segurísima y eficaz, de grande ayuda y colmado fruto.
No entra la ciencia mística en el alma por los oídos, ni por la continua lección de los libros, sino por la liberal infusión del divino espíritu, cuya gracia se comunica con regaladísima intimidad a los sencillos y pequeños. (…)
No es esa ciencia de teórica, sino de práctica, en donde sobrepuja con grandísima ventaja la experiencia a la más avisada y despierta especulativa. [1]  
Entonces la mística es experiencia y no análisis, ni teología, ni razonamiento, ni especulación. Es esa particular experiencia que de alguna manera supera los mecanismos de la conciencia habitual para toparse con otras realidades. Y estas otras realidades han sido relatadas con cierta dificultad por infinidad de espirituales de todas las culturas y de todos los tiempos. Los nombres para llamar a esto son muchos: nirvana en el budismo, samadhi en el zen, iluminación, fana en el sufismo, fusión con Dios en la mística europea, la vacuidad, la inefable, la experiencia de lo eterno, el Gran Silencio, la Revelación, el despertar del dios interior, y un largo etcétera.
Ahora que se esta resquebrajando el manto de racionalismo que ha cubierto nuestra cultura, ahora que se caen los valores y las creencias, ahora empieza de nuevo a ser creíble que la experiencia espiritual sagrada y profunda puede estar accesible a cualquier ser humano que la busque con verdad y sin contradicción. Esto, según van pasando los años lo creo con mas fuerza, viendo como lo espiritual se está despertando de diversas y a veces difusas o confusas formas.
Así que este libro tiene la intención de acercar al lector las experiencias de otros, ponerlas en primer plano para que crezca la creencia de que se pueden tener experiencias trascendentes. Y que realmente son estas experiencias las que dan sentido a la vida y a todo lo existente.





[1]  Miguel de Molinos, Guía Espiritual, edición crítica, introducción y notas de J. I. Tellechea Idígoras, Ed. Universidad Pontificia de Salamanca y Fundación Universitaria Española, Madrid, 1975, págs. 103 y 104.

No hay comentarios:

Publicar un comentario